Sembrando
MODELOS TEÓRICOS LEGISLATIVOS, SISTEMAS O ENFOQUES SOCIO-JURÍDICOS ANTE LA PROSTITUCIÓN
Recapitulando
Cada uno de los modelos o enfoques que asume el país tiene repercusión, consecuencias, resonancia, en las leyes, planes de acción, políticas públicas, educación y en medidas tomadas en relación con la prostitución acordes con la determinación tomada. ¿Cuáles son las consecuencias en términos de beneficios y perjuicios, ligadas a la adopción de una concreta política de la prostitución? Podemos preguntar, en mi país:
* ¿Se permiten los burdeles, casas de citas, …?
* ¿Legaliza o despenaliza los prostíbulos y otros lugares de compra de sexo?
* ¿Legaliza o despenalizan las zonas de tolerancia?
* ¿Se castiga la demanda de prostitución?
* ¿Legaliza o despenaliza a los proxenetas?
* ¿Se castiga la trata con consentimiento?
* ¿Legaliza o despenaliza a los compradores de sexo?
* ¿Se permite la prostitución virtual, el porno?
* ¿Se despenaliza a la persona prostituida?- casi siempre es mujer.
* ¿Se castiga a las mujeres prostituidas?
* ¿El Estado cobra impuestos a la industria del sexo?
* ¿Hay programas de salida?
* ¿Qué podemos hacer desde el activismo de la ciudadanía global para exigir a nuestros gobernantes que promulguen leyes que criminalicen todas las formas de proxenetismo y penalicen a los prostituyentes?
Si la prostitución se considera como un delito es normal que se opine que debe ser penalizada; pero si por el contrario se le considera como un mal necesario porque los hombres tienen licencia de manifestar una sexualidad incontrolable y es la Magdalena pecadora quien salvaguarda la pureza de “María” la esposa, entonces se tolera y se reglamenta; si la prostitución se entiende como trabajo, entonces debe ser legalizada y regulada pero si la prostitución se entiende principalmente como abuso/agresión sexual, necesita ser abolida.
Como el interés desde la misión apostólica es combatir el sistema prostitucional se precisa con antelación:
• Reconocer que la prostitución es incompatible con la dignidad humana.
• Las conductas de proxenetas y tratantes merecen castigo.
• Es preciso desalentar la demanda que propicia la explotación de la prostitución ajena.
• Es prioritario proteger y asistir a las víctimas de estas violaciones a sus derechos.
Una cosa es cierta, antes de pensar en los modelos o enfoques lo que prima son los principios irrenunciables de la mujer que no se negocian: